El entrenamiento de fuerza excéntrica ha cobrado gran valor en los últimos años, con una gran cantidad de estudios corroborando su eficiencia para mejorar el rendimiento del atleta, pero sobre todo como utilización para la recuperación y prevención de lesiones.
Para entender mejor de que se trata el entrenamiento excéntrico de fuerza, deberíamos diferenciar entre dos fases que demanda todo tipo de movimientos, la fase concéntrica y la fase excéntrica.
Movimientos concéntricos
La fase concéntrica es la que se suele producir en contra del peso. Esta fuerza es superior a la carga (por lo tanto hay movimiento positivo) y el músculo se contrae. Un ejemplo sería en un salto, donde en el momento del impuso contra el suelo el cuádriceps estaría en su fase concéntrica.
Movimientos excéntricos
La fase excéntrica sería la contraria, donde la carga es superior a la fuerza y por lo tanto el movimiento es negativo.
En un salto, este momento lo veríamos en una recepción, donde el cuádriceps está frenando la caída. Esta acción no solo aparece con estímulos máximos, ya que lo vemos constantemente en movimientos de recuperación y vuelta a la posición inicial con bajas cargas.
En el movimiento excéntrico la musculatura se contrae, pero además se elonga, algo que no pasa en la fase concéntrica. Este puede ser uno de los motivos por los que se producen efectos positivos en el organismo, ya que al desencadenarse una tensión muscular elevada podría mejorar algunas capacidades físicas y de prevención, por ejemplo:
En este tipo de contenido de fuerza hay que tener mayor control de los ejercicios realizados, cargas, velocidad, etc. Siendo de gran importancia llevar una progresión comenzando con ejercicios más sencillos y de velocidad baja, para ir pasando a aquellos de mayores cargas y velocidad. Es por eso que el “tirante musculador” se ha convertido en una herramienta de gran importancia en cualquier equipo de fútbol, nivel y estado físico.
La aparición de DOMS
Uno de los inconvenientes más grandes del entrenamiento de fuerza excéntrico es la aparición de DOMS (o agujetas), ya que es mucho más común en este tipo de entreno y por ello de aun más importancia a la hora de llevar una buena progresión y adaptación de cargas a cada jugador.
Aprende más sobre el entrenamiento excéntrico en el video sobre 3 USOS del ENTRENAMIENTO EXCÉNTRICO para FÚTBOL Vídeo: https://youtu.be/DV5_H09ncGI
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